¿Cuánto cuesta realmente cargar un coche eléctrico?
Tras lo sucedido en ciudades grandes como Madrid, donde los vehículos ven restringida su movilidad debido a la contaminación que producen, y por ello el ayuntamiento limita la circulación en relación a las matrículas, han comenzado a prosperar otros medios de desplazamiento, como bicicletas, patinetes y vehículos eléctricos.
Poco a poco es más habitual encontrarnos marcas que se especializan en vehículos eléctricos, o que por lo menos lo incluyen dentro de sus productos destacados. Y aunque se va afianzando cada vez más entre los conductores, las variables como el precio del combustible o la autonomía del vehículo son factores que generan dudas en los clientes y evitan que se desarrolle más rápidamente este mercado. Va a ser por consiguiente el problema principal que queramos discutir y aclarar en este artículo.
Para los que han decidido firmemente renunciar al uso de vehículos que utilizan cualquier tipo de combustible fósil, van a poder apreciar cual es la diferencia económica que existe entre la electricidad y el combustible tradicional. También serán expuestas varios métodos de recarga disponibles tanto en el hogar como fuera de él, para que el comprador no tenga ningún problema a la hora de rellenar el depósito.
Si queremos utilizar un medio de transporte que respete el medioambiente y pueda utilizarse en cualquier trayecto lo más recomendable es acudir a un vehículo eléctrico. Cabe además la posibilidad de recargar nuestro medio de transporte con electricidad generada de energías renovables, respetando aún más el medio ambiente.
De media, el coste de combustible para un coche eléctrico que quiera recorrer 100km es de aproximadamente 2 euros. Sin embargo, tendremos en cuenta el tipo de batería, la capacidad del depósito, el precio de la luz y el tiempo que lo tengamos cargando, siendo más barato a más tiempo lleve (puede llevar entre 5-30 minutos a 5-8 horas). Esto quiere decir que el coste es tan variable o más que en un vehículo con combustibles fósiles.
Como indicábamos anteriormente, existen varias formas de realizar el repostaje del vehículo, siendo las más destacadas las ‘electrolineras’ o los puntos de carga en casa. Estas soluciones de recarga serán más numerosas a medida que avance el tiempo, pero ya tenemos varias alternativas que nos permite incluso ir directamente a casa a recargar el coche. Esto es más fácil de instalar obviamente en una vivienda uni-familiar, debido a que no involucramos a una comunidad de vecinos para la instalación. Si en cambio se desea proponer la instalación de un punto de carga en una comunidad se tiene la opción de realizar una instalación en el garaje para que los vecinos que quieran adquirir en un futuro un coche eléctrico tengan un motivo adicional para hacerlo. Todos estos factores de recarga del vehículo se pueden consultar en el concesionario donde se adquiera el vehículo en cuestión, para aclarar cuál va a ser el coste del combustible del vehículo y que forma de recarga es la más adecuada para el mismo.
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